Blai es un chico joven y con mucho empuje, o sea ya que tiene de entrada el perfil propio del emprendedor. La idea de negocio de Blai ha sido simplemente brillante: adquirir un viejo laúd del Empordà (pequeño barco pesquero), de los que aún vemos a los puertos de la Costa Brava, y convertirlo en su pequeño restaurante móvil (food truck) donde, por sus mismas medidas reducidas, los cocineros realizan un show-cooking ante los invitados de la boda o participantes en un evento al aire libre. Desde esta plataforma, y siempre manteniendo el aroma ampurdanés en todo lo que hace, ofrece una carta de restauración tan compacta y original como la cocina donde se elabora.
Su navío puede hacerse presente en cualquier lugar con un mínimo de espacio y vías de acceso. En una boda tanto puede servirnos cara al aperitivo como al snack de media noche, cuando el banquete ya es sólo un recuerdo después de un buen rato bailando y charlando.
La oferta básica la componen dos platos dulces y dos salados, en función de la hora del día y de las preferencias de los clientes. Cada una de estas especialidades es absolutamente original, con que se puede asegurar que los invitados probablemente nunca hayan probado nada parecido. Estos platos se pueden acompañar con dos gamas de bebidas diferentes: el típico ‘ron cremat’ pescador – mejorado por la receta secreta del chef – y los combinados de coco, con o sin alcohol.
Pero las funciones del barco no se acaban con la cocina. También sirve de decoración y puede ser adornado a gusto del consumidor con flores, velas, etc … Los ‘tripulantes’ del laúd van vestidos de marineros, de tal forma que parece que el lugar de celebración se ha convertido en un pequeño puerto, donde por arte de magia ha atracado una embarcación con su tripulación deseosa de tocar tierra. O sea que no es sólo una cocina especializada sinó también un elemento de embellecimiento y personalización del evento.
Todo esto y más podeis comprobarlo personalmente en su Web:
Salud Blai ! Que tu navío llegue siempre a buen puerto!